En anteriores los Juegos Olímpicos ha sido muy difícil controlar la entrada de personas no válidas, ya que muchos conseguían burlar los controles de seguridad a través del robo de tarjetas identificativas, poniendo en peligro a todos los presentes. Por ello, el comité de la organización de los Juegos Olímpicos ha decidido utilizar el sistema de reconocimiento facial.
Este sistema, desarrollado por la japonesa NEC Corp, permitirá reforzar la seguridad del recinto y evitará la entrada de intrusos. Los sistemas estarán ubicados en las entradas a los recintos deportivos y en la de las salas de prensa, para así confirmar la identidad de deportistas y periodistas, que se realizará detectando el rostro de la persona y contrastandolo con una base de datos la cual incluirá identificaciones físicas de entre 300.000 y 400.000 acreditados.
La seguridad no es la única ventaja de esta herramienta. El comité organizativo de los JJOO espera utilizarlo para reducir los tiempos de espera en entradas a los recintos. En este aspecto en sistema no será tan eficaz, ya que los espectadores no pasarán por este tipo de control de seguridad sino que deberán acceder al recinto de la manera tradicional la cual requiere de billetes y en la cual se registran las mochilas y los bolsos en los puntos de entrada.
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